Las declinaciones de los nombres se deven enseñar según la costumbre, aunque yo en mi Gramática seguiré otro rumbo. Pero se ha de procurar que de una declinación no se passe a otra hasta que la antecedente esté bien sabida, porque lo demás es confundir las ideas. Quiero decir que de musa no se ha de passar a dominus, hasta que el niño esté bien egercitado en musa. Este egercicio ha de ser racional i práctico. Racional haciendo observar al niño (con su propia vista para que su ánimo quede mejor informado) que la primera declinación de los nombres acabados en A, en el singular tiene tres casos uniformes, nominativo, vocativo i ablativo, acabados en A; que el genitivo i dativo son también uniformes acabados en diptongo de a e, como musae. Que el acusativo se forma añadiendo una m al nominativo. I a proporción, se ha de enseñar lo mismo en el plural; i esto bastará que se enseñe de palabra, después de bien encomendado a la memoria el singular i el plural. Siempre se ha de añadir el significado a cado caso: como Musa la musa; Musae de la musa, Musae a la musa, Musam la musa, o musa, a musa, de la musa.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada